Usan fotos falsas para inculpar al gobierno venezolano del lamentable asesinato de Yaremi Silva
El pasado sábado en la tarde fue encontrado sin vida el cuerpo de Yaremi Silva, joven de 22 años estudiante de Medicina en la Universidad Nacional Experimental Rómulo Gallegos (Unerg), quien estaba desaparecida desde el pasado miércoles. Su cuerpo fue encontrado “en la vía que conduce a El Castrero, específicamente frente a la Universidad Simón Rodríguez” en San Juan de Los Morros, según especifica el diario La Antena. A través de redes sociales, personas inescrupulosas aseguran que la joven fue detenida por la Guardia Nacional Bolivariana el día miércoles en los disturbios frente al Ministerio de Turismo, en Caracas, culpando a dicho cuerpo militar de su desaparición y posterior asesinato. Para “probarlo” presentan una foto de una joven siendo arrestada, y aseguran que es ella. Pero según el diario La Antena, la joven desapareció el miércoles a las 8 de la noche en San Juan de Los Morros tras abordar un vehículo para ir a casa de una amiga, por lo que es imposible que esa foto corresponda a la estudiante fallecida.
Texto: Alba Ciudad
El diario La Antena indica que “la joven estaba desaparecida desde el pasado miércoles a las 08:00 de la noche, cuando una amiga la citó para verse en la calle Zamora, frente al ambulatorio de Puerta Negra. Yaremi salió de su vivienda ubicada en la avenida Los Llanos (San Juan de Los Morros) y abordó un vehículo marca Ford, modelo Fiesta, color plata, con vidrios ahumados. Esa fue la última vez que su familia la vio con vida”. La familia de la joven se acercó al diario, y publicaron un anuncio el pasado viernes solicitando información de su paradero.
A través de redes sociales, cuentas anónimas manejadas por personas inescrupulosas aseguran que Yaremi fue arrestada el pasado miércoles por la Guardia Nacional Bolivariana, cuando opositores violentos atacaron la sede del Ministerio de Turismo en La Floresta y 105 personas fueron detenidas. Como “prueba” ofrecen la foto de una joven siendo arrestada, y aseguran que era Yaremi Silva. La foto fue tomada por Fernando Llano, de la agencia Associated Press, el miércoles en la tarde en La Floresta, Caracas, horas antes de que Yaremi saliera de su casa rumbo a la de su amiga.
Obviamente la foto de Associated Press no corresponde con la joven, quien se hallaba en San Juan de Los Morros para el momento en el que ocurrían los hechos en Caracas.
Es lamentable este terrible homicidio, del cual la sociedad guariqueña y venezolana esperan que se haga justicia y se tomen medidas para que situaciones similares no se repitan. Pero querer inculpar a cuerpos de seguridad de este terrible homicidio con pruebas falsas y por puras razones políticas, con el fin de exacerbar los ánimos y reactivar las protestas opositoras ya casi desaparecidas, es un acto antiético muy lamentable.
Foto falsa del cádaver
A través de redes sociales también se está transmitiendo una foto del supuesto cadáver de la joven Silva con un tiro en la frente. Dicha foto también es falsa: fue posible corroborar que la foto fue tomada de la página web “Collective Synesthesia“, que reseña a la fotógrafa Sonia Waleska Gómez, miembro de “un colectivo artístico envuelto en activismo anti-gobierno”, quien realizó un trabajo maquillando a otros jóvenes para que parecieran como si hubieran recibido un tiro en la frente. Gómez creó una galería fotográfica, según asegura, para protestar contra el gobierno del Presidente Nicolas Maduro.
No es la primera vez que las fotos de Sonia Waleska Gómez son tomadas por personas inescrupulosas en las redes sociales para asegurar que se trata de cadáveres reales: días atrás, sus fotos circularon en el exterior del país, alegándose falsamente que eran de estudiantes venezolanos que eran secuestrados, asesinados y tirados a las orillas del río Guaire en Caracas.
Al parecer, el uso de este tipo de fotos amarillistas permite exacerbar los ánimos y causa que muchas más personas hagan “retuit” de informaciones falsas o manipuladas. Tal vez esa sea la razón por la que una de las cuentas oficiales del partido de derecha Voluntad Popular, sea uno de quienes difundió las imágenes falsas.
Suministramos también, con propósitos bibliográficos, una captura del sitio web de La Antena, tomada este domingo a las 11:30 de la mañana.
Las diez empresas del mundo que más dinero ganan con las guerras
Es harto conocido que la industria armamentística y militar es una de las que más dinero mueve cada año en el mundo, demostrando así que la guerra es un negocio más que rentable para quienes la promueven.
Según los datos recopilados por el Instituto de Investigación de la Paz de Estocolmo en su anuario de 2013, las ventas mundiales de armas y otros servicios militares de las cien mayores empresas de equipamiento bélico en 2011, alcanzaron los 465.770 millones de dólares, frente a los 411.000 alcanzados el año anterior.
De acuerdo con esta institución sueca, desde 2002, con las guerras de Afganistán e Irak ya en el panorama internacional, las ventas de esta industria se han incrementado en un 60 por ciento, lo que parece demostrar que las empresas que se dedican al negocio de la guerra son inmunes a los efectos de la crisis financiera que ha sacudido al mundo.
Tan solo las diez primeras empresas de esta lista facturaron más que las otras noventa que la forman.
Durante ese periodo, y en clara consonancia con su crecimiento económico, China ha desplazado al Reino Unido como el quinto mayor exportador de armas gracias a un aumento de sus ventas del 162%. De copar el 2% del mercado global de armamento, el gigante asiático ha pasado a rondar el 5% del mismo.
Pero, aún así, se encuentra bastante lejos de los principales fabricantes: Estados Unidos, que domina el 30%, y Rusia, que acapara el 26% de las ventas. Tras ellos se sitúan países como Alemania (7%) y Francia (6%).
En total, un cruento mercado en el que los cinco primeros proveedores de armas en el mundo controlan el 75% del mismo.
Para advertir de los enormes beneficios procedentes de los presupuestos públicos que cada año obtienen estas compañías, “El Blog Salmón”, medio especializado en la materia, ha recopilado los datos más importantes de las empresas que encabezan este listado.
Con una tecnología cada vez más sofisticada, en la que los aviones no tripulados parecen ser el producto estrella, no sorprende que siete de ellas se dediquen al sector aéreo, ni que otras tantas tengan su sede en los Estados Unidos, el país que más dinero invierte cada año en sus fuerzas armadas.
A continuación reproducimos la lista elaborada por “El Blog Salmón”, que viene a confirmar una vez más que la guerra es uno de los mejores negocios para algunos países; a prueba de recesiones y crisis financieras, siempre que exista un nuevo conflicto bélico a la vista.
1 – Lockheed Martin (EEUU): Armadura de misiles, electrónica y espacio aéreo. Ventas por 36.270 millones dólares en 2011. Ganancias netas: 2.655 millones de dólares. 123.000 empleados.
2 – Boeing (EEUU): Aviones, electrónica, misiles, espacio aéreo. Ventas por 31.830 millones de dólares. Ganancias netas de 4.018 millones de dólares. 171.700 empleados.
3 – BAE Systems (Reino Unido): Aviones, artillería, misiles, vehículos militares, naves. Ventas por 29.150 millones de dólares. Ganancias netas por 2.349 millones de dólares. 93.500 empleados.
4 – General Dynamics (EEUU): Artillería, electrónica. Ventas por 23.760 millones de dólares. Ganancias netas de 2.526 millones de dólares, 95.100 empleados.
5 – Raytheon (EEUU): Misiles, electrónica. Ventas por 22.470 millones de dólares. Ganancias netas de 1.896 millones de dólares. 71.00 empleados.
6 – Northrop Grumman (EEUU): Aviones, electrónica, misiles, buques de guerra. Ventas por 21,390 millones. Ganancias netas por 2.118 millones de dólares. 72.500 empleados.
7 – EADS (UE): Aviones, electrónica, misiles. Ventas por 16.390 millones de dólares. Ganancias netas por 1.442 millones de dólares. 133.120 empleados.
8 – Finmeccanica (Italia): Aviones, vehículos de artillería, misiles. Ventas por 14.560 millones de dólares. Ganancias netas por 902 millones de dólares. 70.470 empleados.
9 – L-3 Communications (EEUU): Electrónica. Ventas por 12.520 millones de dólares. Ganancias netas por 956 millones de dólares. 61.000 empleados.
10 – United Technologies (EEUU): Aeronaves, electrónica, motores. Ventas por 11.640 millones de dólares. Ganancias netas por 5.347 millones de dólares. 199.900 empleados.
En la actualidad, “China se está consolidando como un suministrador de armamento decisivo para importantes Estados”, señaló en un comunicado el director de SIPRI, Paul Holtom, quien lanzó sus previsiones para los próximos años y confirmó que “Pakistán continúa siendo el mayor importador de armas chinas debido a sus pedidos de aviones de combate, submarinos y fragatas”.
A pesar de este ascenso, 74 de los 100 mayores fabricantes de armamento se localizan en Estados Unidos y Europa Occidental, que generan el 90% de las ventas en este sector. Entre 2002 y 2011, dichas ventas subieron un 51%.
Como las cifras de las empresas chinas no están disponibles, los cinco mayores proveedores de armas son las estadounidenses Lockheed Martin y Boeing, la británica BAE Systems, la también norteamericana General Dynamics y la alemana Northorp Grumman.
Todas ellas han incluido en su cartera de negocio la ciberseguridad para proteger ordenadores y sistemas de ataques enemigos, que la mayoría de países occidentales están potenciando pese a la austeridad que impone la crisis.
“Diversificarse en la ciberseguridad permite a los fabricantes de armamento ampliar su base civil de clientes, por ejemplo con agencias gubernamentales o gestores privados de infraestructuras vitales, y al mismo tiempo desarrollar avances técnicos para la guerra electrónica en el mercado militar”, analiza el informe.
A pesar del embargo de armas, China ha desarrollado una potente industria militar gracias a su extraordinario crecimiento económico de las tres últimas décadas. A su auge como segunda potencia mundial se suman las disputas territoriales con sus vecinos asiáticos y su reivindicación histórica de Taiwán, la isla que permanece separada del régimen de Pekín desde el final de la guerra civil (1945-49).
Consciente de que la pugna con Estados Unidos por la hegemonía mundial se decidirá en el Pacífico, muy seguramente, China seguirá sacándole músculo a su brazo armado.
Conspira por favor: La Matrix Holográfica
Desde pequeños nos educan para tener una opinión formada sobre todo.Nos enseñan a ver las cosas de un color definido, en blanco o en negro, verdadero o falso, afirmativo o negativo, a creer o a no creer…
En definitiva, nos inculcan que debemos albergar un punto de vista concreto sobre cualquier materia y que no tenerlo es algo nocivo.
Por esta razón, tendemos a rechazar la duda y la indefinición y a aferrarnos rápidamente a la primera explicación o justificación que nos parezca plausible para sentirnos seguros, como si estuviéramos perdidos enmedio del océano y nos agarrásemos a una madera para no hundirnos.
Y esta primera opción a la que nos abrazamos para darle sentido a todo, acostumbra a ser la que podríamos llamar la “verdad oficial”, aquella que nos es ofrecida por el común de la sociedad.
Una cálida verdad acatada por la mayoría que, no solo nos protege del espectro terrorífico de la incertidumbre, sino que nos permite ser aceptados por la gente que nos rodea.
Algo a lo que difícilmente querremos renunciar jamás.
Éste es uno de los mecanismos de refuerzo del Sistema más poderosos que existen.
Y tiene grandes implicaciones en las dinámicas sociales, ya que una vez programada toda una sociedad con estas mecánicas, cualquier idea o concepto que escape a lo comúnmente admitido es atacado por la mayoria de sus miembros, como si alguien pretendiera robarles ese trozo de madera que les permite flotar en el mar.
Se trata de una reacción automática y visceral en contra de todo lo que se salga del redil, un mecanismo de autodefensa y represión del Sistema ante cualquier elemento que lo ponga en duda, como hacen los anticuerpos de un organismo, programados para defenderlo al precio que sea.
Así, cualquier planteamiento que contradiga la verdad oficial, se tilda de locura, irracionalidad, superchería o, siguiendo la expresión peyorativa de moda en este momento, de “conspiranoia”.
Y es cierto e innegable que, sobretodo en las redes, se dicen muchos disparates y estupideces y que las supersticiones, los mitos y la paranoia sin fundamento, campan a sus anchas.
Pero no es menos cierto que la reacción de muchos de aquellos que actúan como “anticuerpos del Sistema”, es generalmente una respuesta irreflexiva y cerril, propia de personas que se niegan a abrir los ojos a nuevos puntos de vista.
Este tipo de gente se aferra a su trocito de madera enmedio del océano y se autoconvence de que ese pedazo de tronco, es en realidad una isla con sólidos cimientos.
En otros tiempos eran los defensores de las doctrinas de la fe, los que denunciaban y quemaban a brujas y herejes y ahora los vemos representados en nuevas y múltiples formas adaptadas a los tiempos históricos, defendiendo fanáticamente la verdad oficial en el campo de la ciencia, las creencias, la moralidad, la política, la educación o la economía.
Los perros del Sistema
Son los típicos personajes que, cuando alguien plantea cualquier teoría alternativa a la verdad oficial, ladran, espuma en boca, tildándola de disparate, sin tan solo pararse un momento a analizar el asunto por sí mismos, como perros soltados por su amo que atacan a un intruso.
Su implicación emocional los delata: invierten enormes cantidades de energía en la descalificación, la burla y el insulto hacia todo aquello que ponga en duda la ficción de “mundo seguro” que rige en su mente.
Quizás no son conscientes de ello, pero a este tipo de personas, les mueve el miedo.
Sienten auténtico pavor ante cualquier concepto que haga tambalear su visión de la realidad.
Tal es su nivel de cobardía.
Ciertamente, la suya sería una postura tan legítima como cualquier otra si en muchos casos no fuera tan agresiva y extremista y ante todo, tan contradictoria.
Su gran contradicción consiste en que acostumbran a defender la necesidad del orden establecido con el argumento de que sin él, el mundo sería un caos, un lugar inhabitable entregado al salvajismo, la barbarie y la criminalidad.
Ésta es la visión que tienen de las personas que les rodean y de la naturaleza humana y por lo tanto de sí mismos.
Y quizás tengan parte de razón, quién sabe.
Pero curiosamente, cuando alguien denuncia que sus “amos”, tan humanos como los demás, también son corruptos, traidores, crueles, mentirosos y criminales, corren a tildarlo de “conspiranoico” y arremeten contra él, con toda su agresividad.
Por lo visto, para los “perros del Sistema”, la barbarie solo se aplica a las clases populares.
Así pues, no solo son esencialmente cobardes a la hora de abrir los ojos a realidades incómodas, sino que además la suya es una actitud servil, elitista y discriminatoria.
Actualmente, uno de sus campos de batalla preferidos es de las llamadas “teorías de la conspiración”, que son capaces de negar tozudamente sin ni tan solo llegar a valorar su verosimilitud y plausabilidad.
Para este tipo de sujetos resulta inaceptable ni tan solo plantear la idea de que los atentados del 11-S de 2001 en Nueva York fueran perpetrados por el propio gobierno norteamericano.
Para ellos, eso son “delirios conspiranoicos” y son capaces de cerrar los ojos ante cualquier indicio al respecto, por sospechoso que resulte.
Sin embargo aceptan sin pestañear las conspiraciones históricas, como el autohundimiento del USS Maine que sirvió a Estados Unidos de excusa para declarar la guerra a España en 1898.
O el incendio del Reichstag Alemán, perpetrado por los propios nazis y atribuido a los comunistas y que sentó las bases del régimen totalitario de Hitler.
O los incidentes del Golfo de Tonkin, con el auto-ataque norteamericano al USS Maddox que permitió a los Estados Unidos involucrarse a escala masiva en la guerra de Vietnam.
O incluso, la Operación MK Ultra de la CIA, consistente en un demencial programa de investigación secreto para controlar la mente de los individuos, algo que podría considerarse el colmo de la extravagancia paranoica, pero que sin embargo fue revelado por el Congreso de los Estados Unidos en una investigación oficial en 1975.
Tales maquinaciones habrian sido calificadas como “conspiranoia” en su momento, por mentes cerradas como las suyas.
Sin embargo, una vez los “amos” deciden otorgar el marchamo de “verdad oficial” a estas teorías, sus fieles servidores las acatan y reverencian como “hechos históricos incontrovertibles”.
De la misma manera, descalifican a quien insinúe la posibilidad de que la actual crisis económica fuera diseñada por una élite con la finalidad de enriquecerse y acumular poder, a pesar de que, los mismos medios que publican “las verdades oficiales” que tanto reverencian, nos muestran, bien claramente, señales de que tales teorías no son tan descabelladas como quieren hacernos creer.
Así pues, a los perros del Sistema no los mueve la lógica de los hechos ni los posibles indicios o evidencias que sostengan cualquier teoría.
No dejan un espacio para la duda razonable y legítima, como sí hacen muchas personas que sí creen en las verdades oficiales, pero que no por ello, se niegan a observar y estudiar otros puntos de vista.
La suya es una postura cerrada e intransigente.
No quieren entender que la información es poder y que aquellos que acaparan los puestos de privilegio no tienen ningún interés en contarnos la verdad sobre sus actividades, simplemente, porque tal hecho les perjudicaría.
¿Algo tan evidente como ésto es tan difícil de asumir?
¿Acaso un mago revela sus trucos?
¿Acaso una empresa comparte alegremente sus secretos industriales?
¿Acaso un marido infiel muestra a sus amantes secretas?
Entonces, ¿quién es el obtuso?
¿El que sospecha que los gobiernos y los poderosos difícilmente nos dicen la verdad o el que defiende a ultranza la “verdad oficial”?
El peligro de la paranoia
Pero, ¿Cuál es la actitud correcta?
¿Creernos toda “verdad oficial” o por lo contrario, no creer nada que provenga de la autoridad o lo comúnmente aceptado?
Evidentemente, ninguna de las dos posturas extremas resulta sana.
Pensar que todo es mentira y abrazar ciegamente cualquier teoría conspirativa resultaría tan absurdo como aceptar ciegamente la verdad oficial.
El mundo caería en una lucha estéril y fanática entre “perros del sistema” y “perros anti-sistema”, que no llevaría a ninguna parte.
Como decíamos al principio, hemos sido educados para sentir intolerancia hacia toda incertidumbre y abrazar cualquier “verdad”, sea la que sea.
Y este es el mal que padecemos en la actualidad: mucha gente, decepcionada con las mentiras oficiales, se lanza temerariamente a los brazos de las supuestas “verdades alternativas”, aunque éstas consistan en una sarta de disparates fantasiosos, ilógicos e insostenibles.
Y es que una cosa es tener una visión crítica y escéptica de la realidad y otra muy diferente es convertir la visión paranoica en un estilo de vida.
Una nueva actitud
Y ante la duda de cómo actuar, ¿por qué no abandonamos las viejas estructuras mentales que nos agarrotan?
Como decíamos al principio, desde bien pequeñitos nos han inculcado que para no ahogarnos en el océano debemos aferrarnos, temerosos, a algo que flote, es decir, a cualquiera de las supuestas certezas que la sociedad pone ahí para nosotros.
De hecho, la sociedad necesita que todos lo hagamos, pues dependiendo de la verdad a la que nos abracemos, seremos clasificados y etiquetados por los demás.
¿Pero qué sucedería si en lugar de hacer eso, admitiéramos de una vez por todas que nos encontramos enmedio del océano y simplemente, aprendiéramos a nadar?
¿Qué sucedería si asumiéramos que nada nos sostiene y que bajo nuestros pies se extiende el abismo insondable y centráramos todos nuestros esfuerzos, no en agarrarnos desesperadamente a esas verdades inertes que la sociedad ha creado, sino en utilizar nuestro intelecto para viajar entre ellas con total libertad?
¿Para qué limitarnos a flotar si podemos nadar sin limitaciones?
Sin la obligación de ser etiquetados por los demás, ni de adoptar tal o cual creencia o tal o cual ideologia, reconociendo, con plena tranquilidad, que toda nuestra vida es una incesante valoración de los hechos y que quizás nunca llegaremos a una conclusión definitiva sobre nada.
Al fin y al cabo, no hay nada que temer: si nos sentimos agotados por el esfuerzo de pensar y buscar, siempre podremos agarrarnos a alguna de las respuestas que la sociedad reserva para nosotros.
Ésto es precisamente lo que tanto teme el fanático, sea del bando que sea: soltarse del flotador y nadar.
Es decir, teme abandonar las verdades y creencias construidas por otros y entregarse a la incertidumbre de la búsqueda y la exploración por uno mismo.
Por eso, siempre vigila receloso al individuo libre y se pregunta: “¿Cómo puede ser que no se agarre a nada? ¿Quién lo sostiene?”
Así pues, suéltate
Empieza abandonando la comodidad de lo comúnmente aceptado por la sociedad, las creencias y doctrinas prefabricadas, lo que te cuenten las noticias o lo que te dicte la autoridad en cualquiera de sus múltiples expresiones.
Sencillamente, no te creas lo primero que te digan.
Date un tiempo para pensarlo todo por tí mism@, analizarlo y darle la vuelta del derecho y del revés.
Ante cualquier creencia impuesta, escucha primero a tu voz interior.
Ante cualquier noticia, pregúntate a quién favorecen los hechos, quién puede ocultarse detrás y qué intereses puede albergar.
Ante cualquier doctrina, pregúntate qué sentido tiene, para qué la necesitas, qué aporta de positivo a tu vida y a la de los demás y quién puede beneficiarse de su existencia.
Juega con tu mente, fantasea, elabora tus propias hipótesis y búscale la lógica interna a tus argumentos.
Y en el caso de que no halles elementos y datos que fundamenten tus conjeturas, simplemente, abandónalas con toda tranquilidad, como harías con cualquiera de esas maderas que flotan en el océano y sigue nadando.
No tienes la obligación de saberlo todo.
La clave radica, no en creerte a rajatabla tus propias teorías, sino en generar nuevos puntos de vista con los que valorar la realidad.
Algo que temen
Y llegados aquí, realiza uno de los ejercicios que más aterroriza a quienes acaparan el poder: ponte en su lugar.
Ante cualquier situación, pregúntate: ¿qué haria yo si fuera “uno de ellos” y quisiera conseguir “tal” o “cuál cosa”?
Es decir, adopta su rol y usa uno de tus más poderosos instrumentos: la imaginación.
¿Crees que estos ejercicios son una bobada sin sentido?
Deberías saber que los grandes grupos de poder lo hacen sistemáticamente.
Para ellos, imaginar y simular situaciones no es ninguna tontería.
Fabulan y conjeturan sobre eventos hipotéticos futuros y preveen y conciben posibles estrategias, maniobras y respuestas para cada situación.
Constantemente estan visualizando el mañana y los caminos que deberían seguir en cada caso para alcanzar sus objetivos.
Los comités de expertos encargados de estas actividades reciben el nombre de Think Tanks y muchas veces son los encargados de generar esas verdades oficiales a las que tan obstinadamente se aferra la población.
Siembran ideas, conceptos y creencias en la opinión pública, planifican las estrategias globales de partidos políticos, grandes corporaciones y medios de comunicación y promueven y moldean a los futuros líderes.
Dicho en otras palabras: son conspiradores profesionales y les pagan por imaginar.
Si siguiéramos con la metáfora utilizada a lo largo del artículo, los expertos de los Think Tanks, serían nadadores de élite que van diseminando las maderas a las que tú debes aferrarte.
Su interés fundamental reside en que jamás aprendas a nadar.
No quieren que te pases el día razonando, valorando, imaginando y atando cabos y por eso se encargan de suministrarte rápidamente respuestas a todo, para que no te pongas a buscarlas.
La Conspiración Masiva
Pero ¿Qué sucedería si de repente todo el mundo soltara sus confortables flotadores y decidiera nadar?
¿Qué sucedería si los conspiradores fuéramos nosotros?
¿Si fuera el pueblo el que utilizara su imaginación para conspirar contra los poderosos y no al revés?
¿Si cada vez que apareciera una noticia, en lugar de acatarla como una verdad incuestionable, cada ciudadano se hiciera todo tipo de preguntas y conjeturas, por incómodas que resultaran?
¿Si en las reuniones de amigos, además de hablar de futbol y cotilleos, se formaran pequeños Think Tanks improvisados y cada individuo fuera un pequeño experto conspirador, planificando las maniobras necesarias para cambiar el mundo?
Como si se tratara de un juego o de una despreocupada diversión narrativa.
Millones de personas abriendo bien los ojos, tratando de ver desvergonzadamente quién se esconde tras las bambalinas o intentando adivinar la proxima linea de diálogo de la gran obra de teatro.
Miles de minúsculas e incontrolables sociedades secretas de carácter cotidiano, centrando sus actividades en un objetivo común: descabalgar del poder a los que mueven los hilos y a sus secuaces y esbirros.
Dicen que las actuales son las generaciones más preparadas de la historia.
En tal caso, con tanta gente bien formada elucubrando, imaginando y actuando a la vez, ¿sería tan fácil engañarnos y manipularnos?
Probablemente no…
Así pues, te invitamos a que lo hagas.
Y no prestes atención a los ladridos desesperados de los perros del Sistema.
Recuerda que ladran porque tienen miedo.
Suéltate, imagina y conspira, por favor.
GAZZETTA DEL APOCALIPSIS
¿Se “fabricó” el atentado del Maratón de Boston?
